Cierto es LA TIENDA DE BARRIO o “TIENDITA DE LA ESQUINA” es una rosa, un modelo de negocio cuyas bondades, “sus pétalos”, la hacen invencible, pero  también es cierto que, como toda rosa, suele tener sus “espinas”, aspectos que lastiman al consumidor y que evitan que la tienda crezca en ingresos y eficiencia. Estas “espinas” son errores en el modelo de operación que son frecuentes en las tiendas, pero a diferencia de los “pétalos” (que son inmutables) estas “espinas” si pueden quitarse, si pueden ser eliminadas para lograr más ingresos y eficiencia, permitiendo al tendero menos esfuerzo y tensión en sus labores. Aquí la espina del desarreglo, una frecuente dolencia del consumidor cuando entre a la tienda y apenas puede pasar de tan amontonado que esta todo.

Los productos no están acomodados de la mejor manera, obstaculizan el paso y están amontonados

La gente se encuentra incómoda cuando están proveedores o cuando hay uno o dos consumidores más.  No se muestran de manera atractiva ofertas y promociones porque no hay espacio o estas molestan más de lo que ayudan a la venta y además suele ocurrir que se encuentran anuncios de promociones navideñas cuando se festejan fiestas patrias.

El acomodo no sigue la lógica del cliente sino la del tendero, hay zapatitos de hijo que ya tienen 18 años, camisetas del club de futbol preferido, productos que no se han vendido en años y en fin mucho espacio que se puede liberar si se piensa en el cliente y su comodidad.

Un buen principio es hacer un plano del local y hacer unos muebles a escala (solo el dibujo en papel) como los que ya se tienen  y buscar cuál sería un mejor acomodo, e ir pensando como contestar la pregunta ¿como estará más cómodo y confortable el cliente?.

Otra actividad inicial sugerida es la conocida “dinámica de la bolsa negra” que consiste en recorrer la tienda con una bolsa negra y tirar en ella todo lo que no se ha usado en mucho tiempo o que simplemente es una adorno personal, en un principio cuesta trabajo por que normalmente se tiene apego a algunos objetos pero al tener la bolsa negra y preguntarse con cada objeto que se toma entre las manos “¿es útil o atractivo para el consumidor?” resulta más fácil tirarlo en la bolsa negra, incluyendo “cascos” de refrescos o cervezas que tienen años en alguna esquina, cajas de plástico, “huacales” que no tienen nada adentro, carteles y posters ya caducos, y en fin todo lo que no genera valor para la venta. El resultado será impresionante, con esta sola dinámica cualquier tienda cambia.

Con las dos actividades anteriores, se empieza a “pelar esta espinita” e ir la quitando poco a poco, normalmente alguna de los 8 grandes fabricantes (Lala, Alpura, Coca Cola, Pepsico, Bimbo , Philips Morris, Modelo y Nestlé) pueden ayudar con diseño, muebles a cambio de ciertas preferencias. También hay en el mercado consultores, diseñadores de muebles y especialistas en este tema que técnicamente se conoce como “Merchandizing”.

Quitando espinas que son dolores para el consumidor, las “tienditas de la esquina” se fortalecen ya que los pétalos, esos si, no se los quita nadie.